En la Argentina, analizar el presente de la macroeconomía es preguntarse a la vez por el futuro de corto y mediano plazo, y por una salida que tiene pocos caminos posibles con repetidos costos sociales e institucionales. Encauzar variables muy desajustadas implica, al menos, un ordenamiento de las finanzas públicas, corregir precios relativos, sincerar el tipo de cambio, normalizar el esquema cambiario y sanear el balance del BCRA. Mucho para un año de elecciones presidenciales y con un frente social largamente dañado. Esteban Domecq, economista, docente de Ucema, y fundador y director de Invecq Consulting, plantea que frente a la complejidad del escenario el próximo gobierno deberá tener “precisión quirúrgica” para que las medidas tengan poco impacto en la actividad y la economía pueda dejar la fase recesiva lo antes posible dañando lo mínimo posible el tejido social.
La economía sale de un primer trimestre complejo. ¿Cómo se