Se caracterizan por emitir un haz de luz “direccional”, es decir, no difusa, tal como suele ocurrir con las lámparas corrientes. Por este motivo se puede encarar hacia una zona determinada y resulta sumamente útil cuando se quiere iluminar un sector especí^co de un ambiente (un elemento decorativo, un sitio de trabajo concreto o de estudio que requiere una luz concentrada, etc.).
■ Dado que un foco emite un haz de luz restringido, sirve asimismo para dar énfasis a un detalle arquitectónico, un cuadro o un objeto interesante, creando un polo