Es genial estar hablando contigo con este nuevo disco y poder hacer al fin esta entrevista de la que habíamos hablado. Y me encanta que sea con un trabajo como este: un disco que es una canción de 47 minutos y 47 segundos. Supongo que eres tú yendo un poco contra las tendencias actuales ¿verdad?
Creo que siempre, desde mi adolescencia, he querido hacer algo más en la línea de un formato largo de pieza musical. Solía escuchar mucho rock progresivo de los setenta en esos años, cosas como Thick As a brick o Tubular Bells y cosas así. Todos esos discos son básicamente una única canción dividida en partes, y siempre me fascinó esa idea. Siempre he tenido el pensamiento en el fondo de mi mente de hacer alguna locura así. Así que al final, lo he hecho.
Y lo estás haciendo en un momento temporal en el que las plataformas de streaming están dominando la industria, siendo la forma preferida de mucha gente para escuchar música, y estando totalmente enfocadas al single más que a los discos. Supongo que por eso sacaste ese pequeño extracto de la canción como single, para poder hacer promoción. Eso es.
Pero este disco es básicamente: “Bueno, la industria está haciendo esto… pero yo voy a hacer lo que me de la gana” ¿verdad?
Más o menos, si. Simplemente pensé que sería divertido darle a la gente una alternativa. Porque tienes razón, la industria musical parece estar centrándose en los singles y los formatos cortos. A veces hoy el término “micro contenido”, ya sabes, cosas para TikTok e Instagram Stories y cosas así. Lugares dónde la música se va haciendo más y más corta, acorde con la capacidad de atención de la gente, que cada vez es menor.