They’re still doing amazing sweetie.
Corría el año 2007 cuando los pantalones a la cintura, los cinturones anchos sobre los vestidos, los chalecos cortos, las botas UGG y los conjuntos de pants de terciopelo estaban de moda, al tiempo que en la radio sonaban éxitos como “Irreplaceable” de Beyoncé, “Umbrella” de Rihanna y Jay-Z, “Glamorous” de Fergie o “Girlfriend” de Avril Lavigne. En aquel entonces, las it ‒y bad‒ girls del momento seguían siendo Paris Hilton, Lindsay Lohan, Amanda Bynes y más. Todas querían seguir, programa de telerrealidad que seguía la vida en familia de Kim, Kourtney, Khloé, Kendall, Kylie, Rob, Kris, Bruce y más. Es oportuno mencionar que originalmente la serie fue solicitada por la cadena televisiva que las producía, únicamente para ocupar un espacio vacío que tenían en su franja de contenidos. ¿Quién diría que dicha apuesta los llevaría a revolucionar la manera en la que, a la fecha, se producen los reality?