Con o sin Gabriel Soto, Geraldine Bazán ha intentado criar a sus hijas: Elissa y Miranda de la mejor manera, aunque los efectos del machismo siguen haciendo eco en nuestra sociedad.
La actriz que volvió al teatro con el monólogo Nosotras lo hacemos mejor, asegura que su deseo al terminar las grabaciones de la telenovela Corona de lágrimas era viajar con sus pequeñas, pero la puesta en escena la obligó a quedarse en México y asumir más retos profesionales que le permitan crecer en su carrera.
“Después de un personaje tan agotador como el de Olga, en el que lloraba tanto, sí me