Un paisaje, una tierra. Nuestra tierra. Hablar de lo que tenemos y aún no hemos descubierto. Nuestro país, un largo viaje de diversos entornos. Inspiración infinita a la que le falta reconocimiento propio. Un norte salvaje. El desierto más árido de la tierra, que nos ofrece la vista a un cielo poblado de estrellas, donde –en un fenómeno único– brota un espectáculo increíble: el Desierto Florido.
Por otro lado, hacia la punta sur se extiende la Patagonia. Un paisaje onírico y grandilocuente, abrazado de glaciares, cultura andina y belleza indómita.
Dentro de este panorama se encuentran dos oasis, uno en cada extremo de Chile. Awasi –palabra derivada de “wasi”, que en quechua significa “hogar”– es lo más cercano a encontrarse en casa mientras se descubren los entornos y paisajes nacionales. Construidos sobre una narrativa que privilegia la