Five Finger Death Punch
f Mice and Men se enfrentaban por primera vez el público español y su bautizo de fuego fue todo un éxito. Ellos mismos estaban impresionados con la reación del público. Tuvieron que enfrentarse a un Wizink Center más vacío, pero supieron comenzar a poner a ebullir la cacerola central del estadio. Desde el primer acorde ponen toda la pasión, no es un grupo tibio. Cuando un grupo pone toda la actitud e ilusión en un escenario se nota y estos chicos demuestran que estan frente a un público para poner toda la carne en el asador y no dejarse ni una alita de pollo cruda. Estos americanos incendian el escenario con una explosión de máxima potencia. Enérgicos, Comenzaron con Unbreakable y retomaron su disco Restoring como Trigger (Rerute to Remain, 2003) o Take This Life con su frenético ritmo (Come Clarity, 2006) el público disfruta siempre muchísimo con los grandes clásicos como Only For the Weak (Clayman, 2000) con la que hicieron cantar y saltar a todo el pabellón. Estos suecos igual ya están aburridos de tocar muchos de sus clásicos, pero no puedo evitar echar de menos algunos como Cloud Connected, por ejemplo, pero mi sorpresa fue mayúscula cuando empezó a sonar una versión más eléctrica de Moonshield, rescatando mi juventud y el famoso Jester’s Race de 1999. La última parte del espectáculo me dejó sin aliento con el tema más suave de Battles, Here Until Forever que me parece una canción muy bonita, y continuaron el repaso de este último trabajo con The Truth. Aunque fueron tres temas que dejaron en los más alto el trabajo de In Flames para rematar: The Quiet Place, Deliver Us y la grandiosa Deliver Us. Siguen siendo demoledores veinte años después, doy fe de ello, aunque hubiera equilibrado más el setlist con muchos temas que se dejaron en el tintero, pero esto siempre pasa a los grupos con una carrera tan extensa. Entiendo que quieran mirar hacia el futuro.
