Ian & Helen EL DULCE ARTE DE MENTIR
Al preguntarles a Sir Ian McKellen y a la dama comendadora de la Orden del Imperio Británico, Helen Mirren, sobre cómo se sintieron al participar en The Good Liar, un filme de suspenso de pequeño presupuesto comparado con las grandes producciones a las que están acostumbrados, afirmaron al unísono: ¡Aliviados! Y es que cada escena debía quedar impecable en pocas tomas.
Ambos coinciden en que trabajar juntos fue una experiencia maravillosa; sus personajes hicieron química y en el set desarrollaron una amistad que el propio McKellen sintetizó así: “Éramos una suerte de Bella y Bestia cuando cantábamos y bailábamos ante Bill Condon y Tobias A. Schliessler (quienes rodaron la versión live action de The Beauty and Beast) y a ellos les debemos, en gran parte, ser el uno por el otro”.
En efecto, en The Good Liar exhalan complicidad, y se respira intimidad, sin mencionar el fantástico vestuario de Keith Madden y la adaptación del guion de Jeffrey Hatcher, lo cual conforma un trabajo rico en manufactura e interpretaciones.
El espionaje, la estafa y la seducción están presentes en un filme que muestra quede citas o de amasar una fortuna a costillas de otro.
