UN ÉXITO ELEGANTE
Dec 02, 2019
4 minutos
TEXTO RUBÍN DE CELIS
FOTOGRAFÍA MATT HOLYOAK
CUANDO NACIÓ EL PRIMER HIJO DE PHILLIP GILMORE, discreto actor teatral y bailarín, y Willicia Goines, pastora baptista, sus padres decidieron bautizarle con un nombre tomado de la Biblia. Hasta ahí, nada fuera de lo común. Pero el nombre en cuestión fue Maher-shalal-hashbaz, una expresión hebrea que significa “muy pronto habrá saqueo y destrucción.” La máxima latina sugiere que el destino está ya escrito en el nombre de quien lo encarna, y en el caso de Mahershalahashbaz (acortado desde 2010 a Mahershala por él mismo) Ali (apellido que sustituyó a Gil-more cuando se convirtió al Islam con el cambio de milenio), no puede ser más cierto. Un destino tan extraordinario como
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